martes, 9 de agosto de 2011

Día 195/245 Construyendo tu nueva personalidad

 
Es hora de trabajar en el juego interno, en nuestra confianza, seguridad y personalidad. Si tu exterior dice que eres extrovertido, seguro y con confianza, tu interior también tiene que ser de extrovertido,  seguro y con confianza Ahora quiero darte soluciones para esos malos hábitos que te llevan a tener personalidades disfuncionales que son las que te están haciendo perder oportunidades en la vida. La mayoria de los conceptos que veras a continuación los he aplicado en mi vida, y la forma más efectiva para que funcionen es usarlos de forma consistente y creyendo en ellos con fe ciega.
Lo primero que deberías hacer es hacer el compromiso de dejar de compararte con los demás, esto no es algún tipo de competencia con los demás.

Lo segundo que te sugiero que hagas es eliminar todo tu lenguaje pasivo. Para de usar la palabra “no puedo” o “no sé como”. Estas son palabras poderosas que usadas con demasiada frecuencia limitan el campo de lo posible y amplían hasta el infinito lo que es imposible.  Y la falta de conocimiento  es solo una excusa más para el fracaso personal; No siempre los ganadores son los que más preparados estan, sino los que más fortaleza y corazón tienen. Necesitas la fortaleza y el coraje para tomar control de tu vida y dejar a un lado la desesperanza. Solamente recuerda que “no puedo” significa “no quiero”.
Lo tercero es ser honesto contigo mismo. La honestidad es la clave para liberarte del hábito del descontrol. Cuando te digas a ti mismo “no puedo hacer nuevas amistades” recuerda que tu verdadero pensamiento es “no quiero tener nuevas amistades”. Empieza a hablarte con la verdad y a decirte a ti mismo las cosas como son. Empieza a CREER que tienes el poder de parar, de descontrolarte, empieza a creer que puedes escoger.  Recuerda que estás al control y que SI QUIERES PUEDES HACERLO. 

Por último, maneja tus sentimientos de dolor, aprende a buscar sentimientos positivos, a través de cosas tan simples como buena música, películas y televisión positiva, buscar amigos optimistas. Eres la consecuencia del ambiente que frecuentas. Busca salir de la rutina, salir de tu casa, dar más vueltas al parque, no importa que estés solo. En otro post hablare de la motivación y la positividad de una manera más extendida.
Para aquellos que han caído dentro de una personalidad complaciente, tienes que empezar a ser más honesto y transparente con los demás. Primero que todo, haz lo que creas que está bien para ti, no hagas las cosas para complacer o quedar bien con los demás. La raíz de la personalidad complaciente descansa en el hecho de que no crees lo suficientemente en ti mismo, no crees que lo que dices/haces es lo indicado, es lo correcto, y pones en manos de otros los criterios de lo que es correcto/apropiado/bueno. Empieza a creer en tu criterio, aprende a tomar riesgos y escucha esa pequeña voz interior que te dice cuando debes decir/hacer algo o no.
Lo segundo que tienes que hacer es preguntar a los demás por sus preferencias y gustos, y encontrar un punto común con tus preferencias y gustos. No te sientas mal por querer y desear lo mismo que ellos. No tienes que tratar de impresionar a los demás haciendo justamente lo mismo que ellos hacen. Si sucumbes a complacer y cumplir los sueños ajenos solo trabajarás para otros y aumentarás tu debilidad y el poder de los demás sobre tus planes y proyectos. 
Lo tercero es aprender a decir que no, y asumir que muchas veces tendrás que decepcionar a las personas. Tienes que saber que la vida no es justa, y la decepción es parte de la existencia. Las personas, y tú mismo, tienen que saber manejar la decepción. Nunca debes dar excusas y ofrecer explicaciones cuando sepas que harás algo diferente a lo que esperan de ti. Tu mismo debes saber que tienes tu propia vida y tus propias necesidades, y debes mostrarlo a los demás con autoridad y claridad. No dejes que los demás te inciten a hacer cosas manipulándote, haciéndote sentir culpable o avergonzado de tus deseos y necesidades. Es tu realidad y debes vivir cómodo en ella.
Por último, permanece firme cuando te irrespeten, y defiende tus intereses y propósitos vitales. Si no lo haces tú, nadie más lo hará. Primero respetate a ti mismo, y después al resto. No permitas que la negatividad de otros te afecte y no vivas pendiente del estado de ánimo de otros para saber si lo que dices/o piensas es lo apropiado. Algunas personas se dedican a probar nuestro carácter, y tenemos que pasar las pruebas con consistencia y con coherencia, eso es lo que gana el respeto de los amigos, de los familiares , pareja,  e incluso del perro que tienes como mascota. Aquel que no sabe lo que quiere, o no sabe defenderlo pierde lo mucho o poco que cree tener.
Hay otros que han caído en una personalidad pusilánime, lo primero que deberían hacer es darse cuenta que su vida NO ES el problema, sino sus sentimientos. Los pusilánimes se encuadran como víctimas, les gusta vivir pensando que todo es una tragedia, que la vida es cruel y que no tienen el control, que lo único que pueden hacer es quejarse y tratar de vivir con lo “poquito” que les tocó. Típicamente los pusilánimes son personas que toman sobre sí muchas cargas (trabajo, problemas propios y ajenos) y cuando ya están desbordados se quejan, critican y culpan a los demás. Esa es una estrategia inconsciente que les permite sentirse desamparados e indefensos, de esa manera se quitan la responsabilidad y le echan los problemas a los otros. Lo adecuado en este caso es dejarse de quejas. Dejarse de auto-compasión, la cual es un verdadero fastidio para los otros. Generalmente tus amigos, familia, novi@s se cansan de tus quejas y tu falta de iniciativa, en los mejores casos te lo dicen a la cara, en la mayoría de situaciones simplemente se alejan con una imagen triste de ti. 
Si estás cansado de algo, simplemente busca cambiarlo; encuentra la solución. Si estás solo y sientes que no has conocido últimamente a amigos, a novi@s, deja de quedarte en casa los fines de semana y de estar silencioso cuando te presentan a alguien, deja de echarte el discurso de “Soy yo. Soy tímido y no le gusto a las personas. Nadie quiere hablarme. Estoy tan solo en el mundo”. Recuerda que es ha sido tu escogencia quedarte en casa, tímido y sólo en vez de salir. Es tu elección. Los pusilánimes terminan por convertirse en resentidos, por su vida desgraciada y por lo afortunado que son los demás, por lo injusto que es el mundo y por los excesos de los ricos y bellos. 

En el caso de los evitadores, el mecanismo que los rige es el del miedo. Algo en tu experiencia te marcó, de tal manera que evitas cierto tipo de acciones para no pensar/sentir aquello que temes. Si temes que te hagan daño, evitarás las relaciones afectivas. Muchos evitadores padecen de miedo al rechazo. Al rechazo que se concibe como un castigo a no ser lo suficientemente bueno/atractivo/rico/divertido… lo que sea… como para ganar el afecto de una persona. Generalmente viene de vivencias familiares, o de las primeras experiencias románticas.  La manera de vencer este tipo de personalidad es entrenándote en una nueva rutina de pensamiento y acción. 

Después estoy yo. O mejor dicho, los distractores, que son los que aplazan cumplir aquello que se han propuesto hacer o lo que deberían hacer. Evitan pagar las deudas, evitar limpiar su cuarto, evitan leer más para aprender a dejar la timidez y buscan que alguien les arregle la vida. Yo era así. Los distractores son los maestros de la comodidad, la cual es una forma de pereza. Suelen dormir demasiado, ver mucha televisión, pero nunca toman la iniciativa de empezar a construir sus sueños. Siempre evitan las responsabilidades, asuntos como ponerse metas y organizarse están lejos de ellos. No se ajustan bien a los horarios y detestan la autoridad que les pide cumplir con sus deberes. 

Los distractores se sienten abrumados por todas sus cargas, siempre se andan quejando, comienzan todo pero no terminan nada. De hecho recuerdo que me buscaba libros en la biblioteca sobre la timidez  autoestima, confianza, etc... Pero nunca termine ninguno. Con un distractor siempre oirás la frase: “lo haré mañana.” Esa es la peor frase jamas inventada.  Recuerdo que cuando estaba cansado de ser tímido y poco social, me decía a mi mismo, mañana cambiara todo. Nunca cambiaba, por que no lo intentaba. O cuando me cambie de instituto, me decía a mi mismo, mañana empezara tu nueva vida. Pero nunca cambiaba nada. Esperaba que todo se solucionase por arte de magia, pero nunca cambiaba nada. Y así en muchas ocaciones de mi vida. Así que la lección que he aprendido de todo esto, es que si quieres hacer algo, ¡HAZLO YA! Empieza en este instante a trabajar en ello, no esperes a nada ni a nadie. Todo dependete de ti mismo.
Para nosotros la alternativa consiste en: adquirir disciplina, ya sea a través de otros (jefes, maestros, padres) y tomarla con madurez. Debemos empezar a aceptar la crítica de los demás como una oportunidad para crecer, no desafiarla con actos de inmadurez, sino aprender a cumplir con sus responsabilidades. Las excusas deberían ser dejadas a un lado, así como el desperdicio de tiempo en actividades inútiles. La palabra clave debería ser: COMPROMISO, con sus proyectos y con los demás. Este blog es ejemplo de eso. Yo no cree este blog para que conocieráis mi vida, ni para contar mis penas o alegrías como si esto fuera un diario... ¡No, no, no! Esto para mi es algo más. Es la prueba de que soy capaz de comprometerme con algo y cumplirlo. Para mi significa capacidad de acción, persistencia, disciplina y compromiso con la gente que lee el blog...
A lo largo de esta "recta final" del blog sera necesario revisar ciertos fundamentos y aspectos personales, con el fin de  mejorar nuestra extroversión y empezar a crear hábitos y acciones diferentes. Mi intención no es cambiar tu personalidad, a parte de que sería imposible, sino que identifiques lo que debes mejorar en tu vida.  Acabar con la timidez no sólo consiste en aplicar técnicas, sino en hacerte mejor, en derribar miedos y bloqueos y acercarte a cumplir tu verdadero potencial. 
¡Saludos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario