domingo, 27 de marzo de 2011

Día 62/245 Trabajando en la soledad.

 

Si quito la universidad y no cuento el tiempo que pasó con la familia, la mayor parte del tiempo me encuentro solo. La consecuencia más notoria de la timidez es la falta de vida social y por tanto la soledad. Estoy hablando de los tímidos extremos y que por normal general estamos más solos que el resto de personas. Sobre todo porque hemos desaprovechado muchas oportunidades de establecer relaciones o porque no hemos tenido el valor suficiente de mantenerlas. De hecho la soledad no está ligada a si tenemos gente alrededor o no, más bien está ligada a otro aspecto. Miles de personas en todo el mundo se sienten solas. Si somos 6000 millones de personas y los países suelen estar muy poblados, y si sales a la calle probablemente veas bastantes personas. ¿Cómo es posible que alguien se sienta solo cuando hay tanta gente?

Personalmente me siento solo cuando no tengo con quien hablar o compartir cosas que me pasan en la vida, a veces no cuento con ese amigo o compañero al que le cuentas tus penas y glorias. De hecho muchas personas caen en depresión o terminan yendo a psicólogos por que no tienen con quien desahogarse y acumulan y acumulan mucha información irrelevante que acaba por pasarles factura.  También me siento solo cuando  no salgo tanto como quisiera, por que  no tengo con quien salir. No voy a determinados sitios por que no tengo alguien que me acompañe, e ir solo me hace sentir aún más incómodo. No compro ciertas cosas por que no tengo con quien compartirlas. Y admitir todo esto es muy triste.

Los tímidos no tenemos una vida social tan amplia como el resto. Incluso llegá a ser nula, limitándonos al trabajo o a los estudios. Y es algo  que hay que cambiar. La vida social  es muy importante en el día de hoy, ya sea por conveniencia (para encontrar trabajo, contactos, novi@, amigos, lo que sea) como para mejorar nuestra autoestima. De hecho algunos estudios afirman que tener una amplia vida social nos aleja de posibles enfermedades psicológicas y físicas. La vida social de los tímidos (y como sabéis hablo de tímidos extremos) se suele reducir a salir con uno, dos, o en casos graves con ningún amigo, debido a que no nos hemos adaptado correctamente a la sociedad. Ya sea por que no tenemos las habilidades sociales suficientes, por que no hemos cogido confianza en determinadas situaciones... Bueno ya sabéis toda esta bula.

Pero todo esto tiene una parte positiva. Y es que tenemos mucho tiempo para nosotros mismos. Para reflexionar y para pensar lo que nos sucede, para encontrar una solución, para  buscar una salida. De algún modo así fue como empezó este blog. Sin embargo muchos se quedan esperando en su soledad, mirando a las estrellas fantaseando con lo que les gustaría hacer o ser, o aún peor con lo que pudo haber sido. Algo es seguro: El terreno se puede recuperar pero el tiempo no. Empieza a trabajar en la soledad de tu habitación en ti. En cómo mejorar tu aspecto, en cómo mejor tus conversaciones, en cómo parecer más simpático y empático, en cómo romper el hielo con las personas, en mejorar tu cultura general, en mejorarte intelectualmente, en leer blogs, libros, revistas... Hay que aprovechar el tiempo. 

En los post de hablar con desconocidos perdemos la vergüenza y el miedo a los acercamientos, pero ¿y después qué?  Como mantenemos una conversación, que contamos, como creamos confort, confianza, etcétera. Es algo en lo que personalmente siempre falló y es como presentarme a un examen que sé que voy a suspender. Tengo muchas ideas de cómo podemos mejorar en esto, y en los próximos días os contare más. También he descubierto que soy más confiado con los desconocidos que con los que conozco hace tiempo. Quizá por que con los desconocidos, sé que no los voy a volver a ver, y me muestro más confiado y extrovertido. En cambio con la gente que me cruzó a menudo me vuelvo tímido, no se si es por que siento que ya me han colgado el cartelito de tímido y callado, e intentar hablar con ellos se me hace aún más difícil.

En definitiva, hay que aprender a vivir en soledad y a mejorarnos a nosotros mismos con las herramientas que tengamos, para empezar a dejar dicho aislamiento. Es como un entrenamiento en la sombra.

Saludos!

miércoles, 23 de marzo de 2011

Día 58/245 Perder la verguenza: La parada del autobus.


Perdón por la tardanza. Ya estoy aquí con otro ejercicio para hablar con desconocidos. Esta vez en un lugar donde siempre se produce contactos con personas. Las paradas de autobuses. Son lugares dentro del recorrido de los autobuses de transporte público. Supongo que como aquí (España) en el resto de países suele haber varias a lo largo de la ciudad. Estos sitios son magníficos para relacionaros. A lo largo del día pasan por ahí muchas personas que no se conocen y muchas veces forman amistades que duran mucho tiempo.


Recuerdos...

Yo he vivido dos experiencias en este lugar, una negativa. Recuerdo un viernes que regresaba de la Universidad y tenía que coger el autobús, al regresar espere en una parada que estaba desolada, hasta que una chica morena apareció por la cera de enfrente. Se le veía animada y con ganas de charlar. Esa energía se nota. Al igual que se nota la ansiedad de los tímidos. Al igual que los perros huelen el miedo y demás.  Nada más llegar se sentó a menos de un metro y me preguntó "¿Hola pasa la linea 40 por aquí? Le respondí algo sorprendido y con esa sonrisa nerviosa que tanto odio... Solte un tímido "si creo". Intente seguir la conversación y demás pero la timidez ya me estaba controlando. En mi mente escuchaba esas vocesillas que me dicen, "no hables, que la vas a cagar", "mejor que piense que eres engreído y no tímido". Al final notaba esa incomodida con la que me he familiarizado mucho tiempo.  Era una situación en la que sabía que tenía que decir algo y preguntar cosas y hablar de lo que sea, pero no lo hacía.

Pero también tuve una experiencia positiva. Un día una chica esperaba un autobús, al llegar el autobús, este paso de largo sin parar, lo que me causo gracia. Yo me encontraba dentro de visión y me preguntó "¿Esto suele pasar aquí?". Lo que me indicaba que no era de esta zona e inconscientemente me daba un tema de conversación. "A veces" le respondí y continué "¿No eres de aquí?"  Y empezó a hablar... Era una chica muy habladora, lo que agradecí, por que odio los momentos de silencio. Estudiaba en otra ciudad y había venido a visitar a su familia. Enlazaba un tema con otro con gran facilidad. Hay gente que tiene este don de hablar y hablar y hablar... (Sobre todo mujeres xD) Y a veces sacaba un tema en el que me manejaba y me unía a su monólogo. Estuvimos como quince o veinte charlando hasta que llegó mi autobus.

En general, es más fácil conocer gente fuera de la ciudad, por que desconectamos de lo que somos normalmente. Cuando estamos de vacaciones, somos más relajados y tranquilos. Durante un viaje organizado conocemos rápidamente a gente congenial. Encontrarás a gente que también viaja sola en lugares dónde se espera o se orienta, por ejemplo en la parada de autobuses o taxis frente del aeropuerto, en la oficina de turismo o en la estación central.


Esperando en la parada del autobus. Dificultad 5/10

El ejercicio es simple. Si tienes la suerte de utilizar el autobús a menudo, podras aprovechar cualquier ocación para iniciar una conversación con alguien desconocido, pero sin forzar demasiado. He descubierto que cuando un tímido intenta forzar una situación social, la otra persona no se encuentra tan abierta incluso se siente incomoda, a no ser que tengas un gran don de gentes, cosa que un tímido suele carecer. Así que si ves, que esa persona no esta con ganas de hablar, por lo que sea, mejor no sigas, tú ya lo has intentado que es lo importante.

En las paradas hay que saber algo y es que la gente no siempre esta disponible para charlar. La mayoría coge un autobus a diario para ir a su trabajo, a su universidad, y estan pensando más en dichas cosas que esperando que alguien les hable. Por lo que no están tan abiertos. Hay que saber diferenciar la energía. Y fijaros en el lenguaje corporal de cada persona. Unos estan mas inmoviles, con manos en los bolsillos y con la mirada perdida, estan pensando en sus cosas. Otra veces hay personas que se nota que vienen de viaje, de paseo, que no son de la zona y miran cualquier cosa que pasa a su alrededor, estan con las manos fuera de los bolsillos y estan algo inquietas.  Son como perrillos que quieren que les saquen a pasear. El ejemplo es horrible, pero no se me ocurría otro.

Cuando encuentres una persona abierta, empieza la charla. Es posible que sea él o ella la que empiece, preguntando por un autobús; si pasó o cada cuánto tiempo pasa.  O puedes ser tu quien tome la iniciativa y lo pregunte primero. Lo importante es romper el hielo, el cómo muchas veces da igual.  La parte buena de estas interacciones es que preguntas tan simples como "¿De donde eres?", "¿Cuanto tiempo llevas aquí?" y un sinfín más, son muy efectivas para hacer amena la conversación, todo lo contrario que si las usas en otros lugares como en una discoteca, donde se espera algo más...

Así que si usas el autobús a menudo, aprovecha ocaciones para iniciar conversaciones con otras personas. Y sino eres mucho de autobueses, puedess pasate algún día por una parada y preguntar si pasa un determinado autobus por el simple ejercicio de hacerlo.

Nada más.
Saludos.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Día 49/245. Famosos tímidos: Kristen Stewart


Hola a todos. Estoy en la última fila de la biblioteca de mi Universidad y estaba leyendo una noticia sobre Kristen Stewart, una los protagonista de la saga de Crepúsculo que se ha hecho tan famosa y que personalmente no aguanto, la respeto, pero no aguanto. Pero la cuestión no es esta.  Quería hablar sobre su timidez. Ella misma se reconoce como una chica muy tímida y nerviosa, y en muchas entrevistas e intervenciones lo refleja. Es un perfecto ejemplo del control que puede ejercer la timidez en nosotros.

Kristen desde pequeña ha estado ligada con la interpretación pero fue con  la saga de Crepúsculo con la que saltó a la fama repentinamente. Ni si quiera ella misma se lo esperaba. El "boom" de esta película la hizo famosa mundialmente y empezaron a reconocerla por la calle, los paparazzis la siguen, la gente y revistas hablan de ella, de sus relaciones, de su vida, bla bla bla. Todo esto llegó por sorpresa y es algo que a un tímido le puede incomodar un poquito ¿no creéis?

Hay una entrevista de Oprah Winfrey a los tres actores principales de Crepúsculo, en la cual hay un momento en que Oprah se dirige a Kristen, con esa seguridad que le caracteriza, y le dice "You look so shy". Kristen le confiesa que es muy nerviosa y Oprah la intenta tranquilizar con un abrazo. Pero aunque ya estaba nerviosa desde el principio de la entrevista se ve como en ese momento se dispara en ella una serie de tics nerviosos; se toca el pelo, se pasa la mano por la boca, se mece en la silla como inquieta por salir de ese sitio, agita rítmicamente la pierna como si siguiera el compás  de una canción de rock. Presa de la timidez incluso llega a tartamudear al empezar las frases. Aquí tenéis el vídeo.



Hay otros dos videos, que si queréis los podéis buscar. Uno de ellos es cuando le entregan el premio MTV, y donde vuelve a reflejar el mismo nerviosismo. Puedo sentir el temblor que empezó cuando leyeron su nombre en la categoría de mejor actriz del año y, unos segundos después, la imagen del galardón resbalando entre sus manos y haciéndose pedazos. Esa vez salvó la situación con humor: "Esto ha sido tan incómodo como imaginé".

Kristen Stewart esta expuesta al público constantemente, aún así no ha dejado de ser tímida. Y es una prueba más de que la mejor forma de superar la timidez es de forma gradual y no de golpe, ya que puede tener un efecto negativo, aumentando el miedo. Aunque ya sabéis que todos somos distintos...

Ella representa perfectamente los defectos de un tímido, pero particularmente creo que esa timidez la hace encantadora y dulce, y de ahí creo que parte su gran éxito. Pero siendo objetivos, no deja de ser una actitud lamentable, sobre todo cuando deja de ser una pequeña característica de nosotros, y empieza a controlar nuestros actos.

Ella es solo un ejemplo más de todos los actores, cantantes y artistas que se han metido en este mundillo para dejar de ser tímidos. Algunos dicen que lo han superado, como Brad Pitt, aunque particularmente no me creo que fuera tímido alguna vez. Y a otros les cuesta más, pero lo terminan logrando como el cantante Freddy Mercury, de la banda Queen. De todos ellos investigare y os contare como dejaron o no de ser tímidos.


Mañana vendré con otro ejercicio para hablar con desconocidos.
Saludos.

viernes, 11 de marzo de 2011

Día 44/245 Tira cómica.


Ordenando mis archivos me encontre con esta tira cómica que la encontre hace ya algún tiempo. Y que es muy ilustrativa con lo que nos pasa a los tímidos.

Como podéis ver en ella un antepasado tímido no se atreve a mostrar su creación, por simple verguenza y por el famoso "que pensaran". Muchos (y no solo tímidos) estamos más pendientes de la opinión de los demás que de nuestro propio bienestar. A veces hacemos cosas por que les parece bien a nuestros amigos, a nuestra familia y al último pensamos si a nosotros nos gusta hacer eso. En otras ocaciones nos callamos cosas para no caer mal a la gente ó ocultamos hobbies y gustos para que no piensen que son rídiculos. No tomamos decisiones propias, por miedo a las opiniones de los demás.

Cuando empezamos  a tomar nuestras propias deciciones, es cuando descubrimos quienes somos de verdad y empezamos a definir nuestra personalidad. Amí me paso con los estudios, siempre he estudiado por que mis padres me lo decían, y  la hora de elegir una carrera en la Universidad, no sabía que quería hacer y me termine equivocando de carrera. Siempre había estudiado por y para la aceptación de mis padres.  No, no digo que dejéis de estudiar jaja... Simplemente replantearos lo que hacéis en el día a día, por que lo hacéis y si os gusta de verdad.

No dejes que la timidez te limite como al amigo de la tira cómica. Es hora de empezar a crear tu mundo. Haz lo que quieres, cuando quieras , lleva lo que quieras, ve con quien quieras, comprate lo que quieres, se tu mismo.

Solo quería dejar esta pequeña reflexión para este día.

Saludos.

martes, 8 de marzo de 2011

Día 41/245. Perder la verguenza: Preguntar por un lugar.



Hello everybody. Ayer repetí la técnica de preguntar la hora con otras quince personas. Creo que es importante ponerla en practica por lo menos una vez más a la semana, para acostumbrarnos. Tenemos que ser capaces de tomar un pequeño tiempo de nuestra vida al mejoramiento personal. Y vuelvo a confirmar que al terminar me sentí menos tenso y más confiado. Es como si liberaras toda la ansiedad retenida. De hecho yo creo que los extrovertidos son extrovertidos, por que siempre estan relacionandose con alguien. Al contrario que los tímidos extremos, que en un momento de nuestra vida, dejamos de relacionarnos y con el paso del tiempo lo hacíamos cada vez menos.

Dejar la timidez es un asunto de proactividad, no podemos quedarnos quietos. Como dije en un post, es importante no parar de actuar y de moverse. Toda acción genera una reacción. Aunque eso suponga exponernos a miedos. Y siento decirlo, pero esta es la única solución. Tenemos que familiarizarnos con el miedo. Ponernos adrede en situaciones en las que tengamos que enfrentarnos al miedo, y donde la única salida sea aliarnos con él y utilizar toda nuestra energía e ingenio. Solo entonces empezaremos a ver como la ansiedad disminuye.

Además hay que aprovechar todas las oportunidades del día a día para establecer relaciones. Desde cuando estas en clase y tienes la oportunidad de hablar con ese chico o chica con la que no has hablado practicamente nunca, bien sea por tu timidez o por que no hubo ocación, hasta cuando te preguntan la hora...   De eso se trata esta serie de técnicas que pongo en practica. Para acostumbrarnos a estas situaciones y para cuando se produzcan en el día a día reaccionar de forma abierta y simpática


Preguntar por un lugar. Dificultad 4/10

El ejercicio que os traigo hoy, tiene la misma mecánica que el anterior solo que cambiamos el interrogante. En lugar de preguntar la hora, preguntaremos un lugar. Intenta que sea un lugar medianamente conocido, una plaza, una calle principal, un edificio, estaciones...

En esta ocasión podremos interaccionar mucho más, ya que la persona a la que le preguntes te ira explicando más o menos el camino y tu podras preguntarle dudas para especificar el lugar. Además la parte positiva de esta técnica  es que la atención de las personas no estaran centradas en tí, que a muchos nos pone tensos, sino que su cebrero estara pensando y recordando la calle, edificio o plaza por la que preguntastes.

Mañana os comentare la experiencia en este mismo post. Así que ya sabeís no os toméis tan enserio la frase: "no hables con desconocidos".

Saludos.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------

Experiencia.

Hola a todos, aunque haya tardado un poco, ya he puesto en practica el ejercicio. Pero la verdad es que no me apetecía para nada hacer esto. Estos días me encuentro muy perezoso, quizá por el clima, ya que no he visto salir el sol en cuatro días, hace mucho frió, y esta todo nublado. Lo único que me motiva es saber que alguien  en algun rincón del mundo, esta delante del ordenador leyendo esto y mi experiencia le servira para algo. La motivación es lo más importante en la vida, una persona no puede conseguir algo, si ese algo no le motiva. Pero es un tema que hablare más adelante.

Así que sin más dilación os cuento que tal me ha ido. Hoy pregunte a diez personas. Solo dos personas me respondieron que no sabían donde estaba el lugar que preguntaba, el resto me lo explicó relativamente bien como llegar a dicho sitio, aunque de lo que se trataba principlamente en este ejercicio era de aumentar el contacto con la gente.

Las preguntas las intente variar un poco, preguntando distintos  lugares, locales, etc. Quiero destacar tres errores que cometí, nose si por la tensión o por lo poco acostumbrado que estoy. El primer error fue no dar las gracias, una chica muy simpática (alomejor eso me asusto jaja) me explicó como llegar a una plaza, y al terminar le dije solo "bien" y me fuí sin decir nada, en plan robot. Cuando me alejaba me dí cuenta que no quedo tan natural, pero enfin, sigamos. Otro error fue interrumpir a una pareja que estaban medio acaramelados, y creo que les corte un poco el rollo. Ahí que saber el momento adecuado. Aún así me indicaron donde podía encontrar una cafetería.

Y el último error y más grave, fue cuando le hable a un chico, que estaba parado en un portal. Le salude y le pregunte ¿Si conocía un supermercado cerca?. No respondió. Simplemente por que no me había escuchado. Había hablado muy bajo. Muchos tímidos tendemos a hablar bajito y para el suelo. Ahí que cambiar esto. Le tuve que repetir la pregunta más alto he incluso hacerle un gesto con la mano como diciendo "hola, estoy aquí". Lamentable.  En próximas ocaciónes intetare escribir sobre como hablar fuerte y con un tono regular.

Todos esos errores elevaron un poco mi ansiedad, pero siempre ahí un pensamiento que me ayuda a seguir a delante: ¿Quién va a acordarse en un año, en cinco, en veinte, en cientos de años, en billones de años, cuando no haya nada sobre la tierra... que fue lo que dijites, como actuastes, o si eras tímido o no? Nadie se va acordar de estas tonterías. No vas a pasar a la historia como el tímido más rídiculo de todos los tiempos... Así que solo ahí que salir y hacerlo lo mejor posible.

Al finalizar el ejercicio, me volví a sentir relajado y con el trabajo hecho.

Saludos a todos.

jueves, 3 de marzo de 2011

Día 36/245 El origen de la timidez.

¡Hola a todos! Para poder avanzar en este camino, creo que debemos analizar y replantear por que somos tímidos. Hoy intentare explicar el origen de la timidez, a base de la información que he recopilado durante mucho tiempo.  No soy psicologo, terapeuta, ni médico, solo un joven que me baso en mi experiencia, para intentar ayudar a todo aquel que lea esto y  sobre todo a mi mismo. Así que sin más preámbulos, entremos en materia.

 Seguro que habéis visto escenas en películas o series en las que un paciente con un trauma, fobia o miedo, es atendido por un psicólogo y este les hace recordar y encontrar la situación en la que se inicio el hecho traumático y a partir de ahí empieza a trabajar en el tratamiento. De igual manera, la timidez no es más que un miedo, el cual tiene su inicio, su explicación y su tratamiento.

Una de las preguntas fundamentales sobre la timidez es si es algo con lo cual las personas nacen o es algo que adquieren en algún momento crucial de sus vidas. Lo que la psicología ha descubierto es que existe una tendencia biológica hacia la timidez, lo cual puede explicarse porque los hijos de padres tímidos son tímidos. Quizás podrías revisar en tu familia y ver si existen personas cercanas a ti que sean tímidas, eso puede darte una pista sobre lo que has aprendido en modelos que no han sido extrovertidos.

Si embargo, otros investigadores afirman que los niños de 3 años de edad que muestran esos comportamientos tímidos, se debe a que han aprendido las conductas retraídas de personas cercanas o por experiencias propias que le lleven a responder con timidez. Llegar a una conclusión definitiva es como responder a la pregunta de qué fue primero el huevo o la gallina. Quizá si se puede asegurar que los síntomas de la timidez aparecen a temprana edad y conforme se producen las experiencias de socialización, se agudizan o desaparecen.

Lo que sí han encontrado los científicos son diferencias significativas entre el sistema nervioso de los niños tímidos y el de los niños confiados y extrovertidos, de hecho se encontró que hay una región del cerebro llamada “complejo amigdalino” que muestra una gran actividad en los tímidos ante la presencia de desconocidos y situaciones nuevas. El núcleo amigdalino es una de las zonas de la masa encefálica que está relacionada con la capacidad para distinguir los rostros y es una de las que rige la emotividad, en especial los comportamientos relacionados con la agresividad.

Aunque podamos sentirnos presos por la biología, incluso por nuestros genes, o por nuestros aprendizajes de la infancia, hay una muy buena noticia: la capacidad de adaptación y de aprendizaje de nuevas conductas en el ser humano es inmensa, así que puedes aprender a liberarte de los rasgos tímidos, incluso puedes aprender a proyectarte como una persona espontánea cuando lo desees, o como un introvertido muy interesante para el sexo opuesto y para las demás personas. Todo esto es lo que intento lograr con lo que  publico en el blog.

En psicología también se ha dado una corriente que ha profundizado en cómo aprendemos a ser tímidos. Dentro de estas hipótesis se afirma que la respuesta de la timidez es una reacción fóbica ante situaciones sociales, frente a las cuales los comportamientos extrovertidos han traído consecuencias negativas, quizás burlas, ridículo o falta de atención. Por ejemplo, para un extrovertido el rechazo de una mujer puede ser algo divertido. Sin embargo para el tímido el rechazo de una mujer puede ser altamente perjudicial, debasta  su estima y valida los comportamientos de recelo y resguardo. De hecho he descubierto que mucha gente empezo a ser tímido cuando en su infancia trataron de ser espontáneos, de ser auténticos y los adultos o los niños mas extrovertidos los reprimieron.

A los factores hereditarios y sociales creo que hay que añadir el factor circunstancial; los complejos y fobias. Todos tenemos algo de nuestra apariencia o personalidad que quizá cambiaríamos, algunos tienen esto exacerbado, y de hecho les gustaría volver a nacer de nuevo pero bien, incluso a las personas más atractivas les pasa. También hay momentos en nuestras vidas que nos cambian por completo, la expresión tan famosa de "ese momento me cambio la vida", suele usarse para expresar grandes y felices acontecimientos de una persona. Pero para mucha gente no significa nada positivo, significa el comienzo de un miedo en nuestro interior; son el inicio de fobias. De hecho en muchos casos la timidez se produce a partir de traumas o fobias concretas, y que son como el pistoletazo de salida que permite que la timidez se incremente en nosotros.

Y es lo que me pasó a mí, a los 14 años más o menos, fue cuando empeze a tener malas experiencias con exposiciones en público, provocado por burlas de compañeros y demás. Que al fin y al cabo no eran más que unos niños...  Las primeras ocaciones no le dí importancia, pero cada vez que tenía que hablar en público, sentía en mí los síntomas de nerviosismo de las primeras veces, y este estado de nerviosismo terminó extendiendose a otros ámbitos de mi vida. Además en ese tiempo yo era muy extrovertido y empeze a notar mi cambio cuando ví que no salía tanto con amigos, que no establecía nuevas amistades, que se me dificultaba hablar con gente nueva y que no tomaba la iniciativa en absolutamente nada. Me estaba convirtiendo en lo contrario a lo que era hasta entonces. Mi timidez había empezado.

Al principio me volví un poco antisocial y después de un tiempo,cuando todo se calmo, como consecuencia, termine siendo alguien tímido e inseguro. De hecho todo el tiempo de aislamiento social termina por ocultar nuestra vitalidad en lo más profundo de nuestro ser. Toda la inactividad social te pasa factura, y no sabes que decir en algunos momentos, que charlar, como actuar o estar preocupado por otras cosas como complejos, obsesiones y demás... No fue hasta que viví otras experiencias dolorosas cuando sentí que era necesario un cambio, y decidí empezar este camino.

El primer paso para sanar la timidez está en buscar las experiencias pasadas que te mostraron que no valías lo suficiente y empezar a sanarlas. A partir de allí sanarás creencias y sabrás que estabas muy equivocado en el poco valor que te dabas, y en el mucho valor que les dabas a las demás personas.


Hay otras fuentes de la timidez entre las cuales puedes encontrar alguna de estas:

1. El recuerdo recurrente de una mala experiencia interpersonal propia u observada en otros.

2. Imaginar que se va a actuar inadecuadamente y hallarse constantemente ansioso por ello.

3. No aprender las habilidades sociales necesarias.

4. Aprender que uno resulta “inadecuado” y traducirlo en ideas recurrentes como “soy un inútil”, “nunca seré capaz”, “soy demasiado raro”, “estoy muy loco”.

5. Quizás las personas importantes para ti, padres, profesores, amigos, amigas, y personas con autoridad para ti no mostraron interés en algo que tenías que decir o solían interrumpirte, corregir e sistemáticamente tus opiniones y actos.


En definitiva, si descifras el código de lo que te limita, podrás dar el siguiente paso, por que al final los limites no son más que fronteras que nos indican donde se encuentra nuestra felicidad... 

Saludos!